Con un rumbo más cierto que en otras oportunidades, el mercado inmobiliario rural se encuentra activo y, pese a que falta mucho, hay operaciones concretadas y aparecieron inversores genuinos.
Meses atrás en el sector se comparaba a la actividad con una carrera de autos que estaban en la grilla de partida, esperando la luz verde del semáforo para largar.
Ahora señalan que “la carrera arrancó”..